Procuradores

La Procuraduría es una profesión  independiente que puede ser ejercida por todos aquellos que reúnan las condiciones establecidas, lo soliciten y tramiten su ingreso a un determinado Colegio de Procuradores. Esto implica que todos los procuradores deben estar colegiados.

Un procurador es el encargado de tramitar y representar a un cliente, sea una persona natural, un grupo de personas o una persona jurídica, dentro de los tribunales de justicia, defendiendo sus derechos de la mejor manera posible y siempre de buena fe. Todos los procesos judiciales deben ser atendidos por un procurador, salvo los casos que la ley defina como excepcionales. Sin embargo, en la mayoría de los casos la comparecencia en juicio debe ser mediante un Procurador autorizado para trabajar en el Juzgado o Tribunal, que conozca de los autos y con poder declarado por un letrado. Los requisitos para ejercer como procurador son los siguientes:

  • Haber nacido en España y tener la ciudadanía española.
  • Ser mayor de edad.
  • Haber obtenido una licenciatura en derecho.
  • Obtener el título de procurador en el ministerio de Justicia.
  • Haber ingresado a un Colegio de procuradores.

No pueden ser procuradores los que hayan sido condenados o procesados en causas criminales, o que hayan recibido pena superior a presión menor, o a cualquier pena relacionada con estafas, desfalcos o cualquier otro que afecte el prestigio de la profesión. Es posible obtener una rehabilitación en estos casos que debe pedirse y justificarse antes de ser aprobada. De igual modo, es posible que el Colegio de procuradores sancione a uno de sus miembros, ya sea con una suspensión o la expulsión definitiva.

Procuradores Destacados

Un  procurador no es lo mismo que un abogado, y en la mayoría de los casos es incompatible que uno realice las funciones del otro. Por esto es necesario contar tanto con un abogado como con un procurador para realizar las tramitaciones pertinentes en los tribunales competentes. Debe existir necesariamente una comunicación expedita entre procuradores y abogados, tanto en el tránsito de información hacia el cliente, como hacia el juez y los diferentes estamentos que puedan venir, como peritos judiciales, administrativos, etc. Las funciones que se le encomiendan al procurador están dirigidas a hacer más expedito el proceso judicial. El procurador debe ser responsable de todas las tramitaciones que sea necesario: recibir y firmar emplazamientos, citaciones, notificaciones, etc.; asistir a todas las diligencias y actos necesarios del pleito, todo ello en representación y a favor de su cliente.

Los procuradores están reconocidos como elementos fundamentales e imprescindibles para el ejercicio correcto y cabal de la justicia, actuando siempre con profesionalismo, decencia, lealtad y sinceridad. También están sujetos a la obligación de atender de manera gratuita a las personas que no puedan costear sus servicios. En estos casos, los interesados deben acudir al colegio de procuradores de su localidad para postular a este beneficio.



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Una respuesta para Procuradores

  1. Dannae Dice:

    Hola, me gustaría saber si me pueden ayudar a encontrar un procurador barato para una causa relacionada con un accidente de automóviles.

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